“La vida humana acontece sólo una vez y por eso nunca podremos averiguar cuáles de nuestras decisiones fueron correctas y cuáles fueron incorrectas. En la situación dada solo hemos podido decidir una vez y no nos han sido dada una segunda, una tercera, una cuarta vida para comparar las distintas decisiones”
Milan Kundera en La insoportable levedad del ser
Quiero aprovechar y dejarles esta frase.
Seguramente te preguntas ¿Pero a qué viene eso?
Empecemos…
Todo comenzo un 27 de febrero del año 2000
Un día común y corriente en el campo de Mountain View de Google. El sol salía y las bicicletas pedaleaban.
Aquel día fue el día en el que se resolverían muchos de los secretos de internet que hoy ya conocemos.
Unos ingenieros tuvieron una idea bastante particular
encontraron la manera de que los usuarios hagan click, vuelvan y se queden en el sitio
¿Qué hicieron?
Crearon los famosos A/B test
(Que hasta ese entonces solo se aplicaban en la industria farmaceutica)
Pero antes, ¿Qué es un A/B test?
En el mundo digital dichos test consisten en poner a prueba distintas variables (público en una campaña, contenido, colores, palabras, ubicaciones de un anuncio, y muchas otras cosas más) para ver cual funciona mejor.
Estas variables se muestran a grupos distintos con el objetivo de ver cual es el grupo que mejor reacción tiene y así darnos cuenta que estrategia debemos utilizar.
¿Pero qué fue lo que verdaderamente ocurrió ese 27/2/2000 que cambiaría el mundo?
Lo que pasó fue que decidieron hacer un experimento en la página de Google.
Dividieron a los usuarios en dos grupos.
Un primer grupo al que se les mostraron veinte links en la página de resultados
y un segundo grupo, el de control, al que se les mostraron los diez links usuales.
Ahí midieron la satisfacción de los dos grupos basándose en cuanto regresaban al sitio.
¿Eso es lo revolucionario?
Tranquilooooos, vamos a analizarlo bien
no sean impacientes.
La clave a entender es que estos experimentos tienen una gran ventaja en el mundo digital
si lo pensamos en el mundo offline podemos ver que es mucho más lento, menos medible, menos efectivo, ergo mas complicado.
En cambio en el mundo digital es barato y efectivo.
No se necesita reclutar gente, ya que sólo escribiendo una linea de código y asignándosela a un grupo tenemos el trabajo hecho.
Si queremos ser más puntillosos podemos también medir clicks, movimientos del mouse y comportamientos sin tener el compromiso de que ellos sepan que están siendo estudiados.
Todo esto fue bautizado como los famosos A/B test que hoy conocemos e implementamos en nuestras campañas digitales.
Desde ese entonces los A/B test solo crecen en numero
en 2011 Google implemento dos mil de estas pruebas.
Incluso Facebook aplica miles de estas pruebas hoy en día en cada uno de sus usuarios sin que nos demos cuenta
¿Te gustó?
Tengo más para vos
Un empleado de Google le llevó esta idea a Obama en su primer campaña presidencial para el diseño de su página web, mails y distintos diseños.
Así fue que se mostraron distintas versiones de estos elementos con el fin de ver cuales tenían una respuesta mas positiva y cuales una más negativa
Una de las tantas pruebas que se implementaron fue en el propio sitio web, donde se decidió probar algo tan simple como un botón.
Las variantes eran “Join us”, “Learn more”, “Sing up”.
¿Cuál creen que ganó?
Hagan sus apuestas…
La ganadora, y por amplia diferencia,
fue “Learn more”.
Con esto quiero resaltarles la importancia de los A/B test
con pequeños cambios podemos detectar grandes comportamientos que nos lleven a mejores resultados.
Si bien no podemos medir si las decisiones de nuestras vidas fueron correctas o incorrectas, como ciertamente afirma Milan Kundera,
al menos podemos medir las decisiones que tomamos en nuestras campañas, sitios webs y contenidos.
